miércoles, 16 de marzo de 2016

Museo de Arte Moderno BOG.

Museo de Arte Moderno BOG.


El arte moderno no es del gusto de todos, hay quienes prefieren técnicas de antaño como el oleo sobre lienzo o se aferran a otras más milenarias como la acuarela. Sin embargo, hoy en día el arte moderno es el encargado de plasmar acontecimientos actuales; tal es el caso de la exposición: "Atopía, migración, legado, ausencia de lugar." Actualmente presentada en el Museo de Arte Moderno de Bogotá, MAMBO. 

Originaria de Vienna, Austria, la exposición plasma como los artistas han lidiado con las problemáticas migratorias alrededor del mundo, pero más allá de la simple migración, como lo explica el texto en la entrada del museo, Atopía muestra como los artistas han plasmado las ideas de lugar, geografía, legado, tradición, cruce de frontes nacionales, culturares y sociales. Para el caso de la parte de la exposición que llegó a Colombia, los artistas a exponer son en su mayoría latinoamericanos, con el fin de que la exposición generara un vínculo más estrecho con los visitantes del Museo de Arte Moderno de Bogotá. 

Personalmente, si me preguntan lo que me gusta del arte moderno, sin duda alguna hago alusión a la oportunidad brindada por parte de los artistas al público, de interactuar con sus obras. Tal es el caso de una pared llena de manillas con deseos de 60 personas encuestadas al azar en las calles de Brasil, donde uno puede tomar una manilla y en el agujero que queda vacío poner un papel con un deseo personal. 


Para aquellos con un sexto sentido del arte más desarrollado, una forma de interactuar es leer expresiones, ya sea en una fotografía o auto-retrato sobre lienzo al oleo, tal vez incluso en las caras de unas marionetas, calaveras de cartón o simples carteles, todos estos trabajos hechos a mano.



Las obras para interacción con el publico van desde una pared en la cual se proyectan una serie de fotografías donde se podían formar sombras y el publico puede tomar sus propias fotos, hasta una pared en explosión en la cual se puede caminar a través de partículas de concreto volando por el aire.




Los museos son una gran oportunidad para conectarse con el espíritu, para recordar el lado amable y sensible de las personas, pues todos aquellos que se encuentran allí reunidos no necesariamente tienen que ser fieles seguidores del arte para admirar la calidad en la forma de plasmar sentimientos como lo hacen los artistas. Los sentimientos de furia, decepción, alegría, desamor o enamoramiento, son plasmados por los simples mortales con un ceño fruncido, una depresión o discusión. Pero los artistas, quienes personalmente no considero simples mortales, lograron elevar sus almas al punto tal de desarrollar una sensibilidad profunda, lo cual los lleva a expresar sus sentimientos mediante exquisitas obras de arte.

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viernes, 11 de marzo de 2016

CUESTIÓN DE TIEMPO

CUESTIÓN DE TIEMPO



Las escalas temporales son vividas de acuerdo al contexto social en el cual nos encontremos inmersos; en la academia por ejemplo, nos es pedido un informe o monografía de una semana para otra, el tiempo de quienes laboran en la ciudad se basa en su horario de oficina de 8:00am a 12:00m y luego de 2:00pm a 6:00pm, para quienes laboran en el campo, su día inicia a las 6:00am y culmina a las 5:00pm. Los estudiantes universitarios vivimos nuestra escala temporal en torno al semestre cursado, por otro lado los estudiantes de colegio están sumergidos en el año lectivo al cual fueron promovidos y persiguen el siguiente. 

Para las civilizaciones antiguas, la medición de tiempo, era bastante larga, si algo recuerdo de mi visita a Machu Picchu, era que se podían tardar unos 30 años en construir un templo o 7 años pagando sus impuestos mediante el trabajo de fragmentar una roca. Ahora lo más cercano a estas escalas temporales, son las medidas del tiempo de nuestros sabios campesinos, los cuales articulan su vida en torno al cultivo que están realizando en el momento, estos no tardan menos de 6 meses o incluso, si mi memoria no me traiciona y las enseñanzas dadas por mi aficionado padre no me fallan, 2 largos años como es el caso del cultivo de piña.

Al arribar la revolución industrial y posteriormente la modernización, el tiempo se transformó en dinero, era una nueva manera de medir los ingresos o egresos de una industria. Producir más artículos en la menor cantidad de tiempo posible, significa aumentar la productividad y por lo tanto aumentar las ganancias, aumentar el dinero por las ventas y aumentar la cantidad de capital acumulado.

Nosotros los llamados millennials, los jóvenes actuales, somos hijos de esta transformación del tiempo en dinero, fuimos criados bajo las enseñanzas de ir a la universidad tan jóvenes como sea posible, graduarnos tan pronto como se pueda porque hay que realizar especialización, maestría y doctorado luego de la universidad, con el fin de ganar más dinero. Quedaron atrás las enseñanzas de amor por lo que hacemos o disfrutar la escala temporal inmediata en la cual nos encontramos,  quedó en el olvido que la vida también nos deja enseñanzas a través de viajes, museos, nuevas culturas, voluntariados, caminatas, deportes y cualquier tipo de lección no dictada dentro de las 4 paredes de un salón de clase.

Ahora nos dicen que pasar 6 meses o un año en otro lugar, tomando un curso de idiomas o dedicados al yoga, un deporte o incluso un curso de cocina, es perder el tiempo, porque el tiempo es dinero y no hay que desperdiciarlo en cosas que a futuro no nos van a traer más dinero. ¿Dónde quedó entonces la satisfacción personal de hacer algo que amamos o soñamos por mucho tiempo? Queridos millennials, tengo algo para decirles, somos ricos, como lo dice Pitbull en "Feel this moment", su canción con Christina Aguilera: "Time is money, only difference is I own it." Así es, somos ricos porque nosotros somos dueños de nuestro tiempo y de lo que queramos hacer con el.

No los estoy incitando a dejar cualquiera que sea el estudio o trabajo realizado por ustedes en estos momentos, de igual manera la formación académica y laboral es importante y una experiencia enriquecedora, pero si quieren salir a perseguir alguno de sus sueños o realizar algo deseado desde hace muchos años, salgan y háganlo. Pongan en pausa cualquier cosa que se encuentren haciendo y vayan a perseguir eso lo cual los llenara de felicidad y satisfacción personal. Si se encuentran en un momento difícil, con mayor razón no lo piensen dos veces,  ya saben lo que pasa en el libro de Elizabeth Gilbert, "Comer, rezar, amar".

No tengan miedo a hacer lo que quieren, aunque sea una reflexión de "Gossip Girl", temporada 4, capítulo 14, recuerden siempre que: "El universo tiene un crudo sentido del humor, a veces obtener lo que soñabas se convierte en una pesadilla, todo lo que quieres siempre viene con unas condiciones". Por eso es tiempo de salir a vivir sus sueños y hacer lo que quieran, antes de que se les pase la vida en un trabajo el cual pensaron era su trabajo soñado o estudiando la carrera que creyeron debían estudiar.


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